Apple presentó su iPhone X, pero no solo eso, mostró de nuevo su músculo en la organización de lanzamientos y el poder de la marca que por 10 años ha estado entre las consentidas.
Apple estrenó su espectacular centro de operaciones, dio a conocer tres nuevos teléfonos y lanzó un reloj muy superior al anterior: así fue como dio varios pasos adelante en la carrera por el futuro.
El gigante tecnológico presentó este mediodía la nueva apuesta de su iPhone, con el que celebran los diez años de uno de los adelantos tecnológicos más importantes de lo que va del siglo. Y no decepcionó.
Tim Cook, el capitán del barco Apple, arrancó la jornada en el teatro Steve Jobs con una breve ponencia arquitectónica: la marca de la manzana y sus retails a nivel mundial como showrooms que mezclan limpieza en diseño con la experiencia de sus usuarios.
Y ni hablar de la propuesta del nuevo Campus Apple, una obra rotunda de Norman Foster, el arquitecto de mayor impacto a nivel global.
Pero el protagonista fue, sin duda, el iPhone X. La X para conmemorar el décimo aniversario del lanzamiento del primer iPhone o para nombrar lo que aún no existe. Lo que viene.
“Sin duda hay un adelanto del producto, que consiste en conjuntar características de alto desempeño, con los nuevos procesadores, y un consumo de energía mejorado. El estado innovador del iPhone se mantuvo con estos lanzamientos”, dijo Rogelio Bustamante, experto en telecomunicaciones e investigador del Tec de Monterrey.
Las innovaciones de este lanzamiento son una ecuación de tecnología de punta en software y hardware.
El iPhone X integrará reconocimiento facial como uno de sus principales adelantos. Éste estará conectado al desbloqueo del teléfono, verificación de identidad, pagos bancarios y, por supuesto, a las diversas modalidades de la cámara –la cual podrá realizar tomas de gran angular y con zoom mejorado–.
En cuanto al equipo físico, los usuarios se olvidarán de los botones con el iPhone X, ya que la pantalla OLED de este equipo ocupará todo el frente del mismo y eliminará los bordes.
Tanto el sonido como los micrófonos del nuevo iPhone serán considerablemente superiores a los de las generaciones pasadas, mientras que el procesador interno está preparado para la mejor experiencia de realidad aumentada.
De la presentación que tuvo lugar en Cupertino, Bustamante destaca los siguientes como los elementos a seguir de la exposición de Cook:
La mercadotecnia no falla
Pasan los años y Apple sigue causando tanta euforia como en las épocas de Steve Jobs. “Uno de los legados de Jobs es la mercadotecnia que han hecho. Más allá de la innovación –que sus cambios a veces son buenos y otras, no–, el concepto que ha fabricado alrededor de la marca es lo que hace que robe la atención mundial”, dice el experto. Su nueva sede y concepto de tiendas son muestra de esa personalidad única.
Batería
No se habló mucho de la capacidad de la batería en el iPhone X, pero se ha dicho que el teléfono estará activo dos horas más con una sola carga, en comparación a la versión anterior. “Con este procesador, la capacidad de carga inalámbrica y la opción que tiene de desbloqueo sin necesidad de presionar un botón, lo que refleja es una batería mucho más poderosa que cualquiera que se haya visto en un iPhone”, comentó Bustamante.
Competencia cerrada
Tras los adelantos anunciados por Apple, se confirma que la marca de Cupertino buscará continuar a la cabeza de la innovación. “Es evidente que tienen una gran cantidad de gente dedicada a los avances, a la belleza y a la tecnología del dispositivo”, remarcó el investigador. Se espera, según el experto, que Huawei busque avances paralelos –no necesariamente seguir los pasos de Apple— y Samsung apostaría por características similares a las del iPhone X.
La emoción es el futuro
Es probable que, en un futuro próximo, y a partir de tecnologías como la FaceID, veamos a los smartphones identificar la emoción de los usuarios. Ya sea tristes, enojados, cansados o felices, el teléfono funcionará como un compañero para enviar recomendaciones y mejorar el día de su propietario. Esto sería un cómplice ideal para las posibilidades del marketing digital.
La importancia del iWatch
Para complementar el punto anterior, los wearables, como el iWatch, serían el complemento ideal del iPhone. El reloj inteligente de Apple apunta a funciones de monitoreo total del usuario, por lo que la información entre los gadgets sería un intercambio de datos las 24 horas.
Enviar WhatsApp